lunes, 21 de mayo de 2012

Melancolía

Para empezar, diré que fracasé rotundamente en mis objetivos para éste fin de semana. Fui totalmente inocente al no considerar el día lunes, festivo donde se conmemora la ascensión de Jesús (Bendita sea la Iglesia Católica y sus festivos) lo que nos genera puente, por lo que el lugar donde me hospedo ahora -La casa de mi padre- se hizo tentativo para aquellos que querían festejar, y por tres días no tuve ni quise tener tiempo para la reflexión.

¡Bendita Pascua!


Por otra parte, creo que en una entrada pasada había dicho que mi padre me comentó que el canto a la melancolía casi que garantiza el éxito. Bueno... la verdad no dijo eso. Exactamente, era el canto al despecho, pero, ¿no es el despecho una de las múltiples figuras de la melancolía? ¡Sigue estando vigente entonces lo que dije! Pero, el tema es para lamerse los dedos.

Algo que llama mucho mi atención es el contemplar como cuando una canción con un contenido notablemente melancólico, como lo es "El problema" de Ricardo Arjona, levanta las voces en unísono de todo aquel que se sepa la letra -que casi siempre son todos- quienes cantan a todo pulmón. Y no sólo sucede en el caso de ésta canción, sino con una serie de canciones más que son dedicadas a la ausencia de alguien. Bueno, no negaré que yo era partícipe de tan maravilloso escenario, pero, es porque soy trágica y lo trágico de por sí es melancólico (Discutible.. pero, no quiero discutir eso conmigo misma, más cuando tengo tantos debates internos ahora mismo). Oh, duda, me encanta dirigirte mal y en vez que plantearme problemas tales como estrategias para reducir la corrupción en el país, te llevo a reflexiones sin sentido cómo el qué incentiva ésta conducta en ellos. Cómo me encantaría saber las batallas que libran, y que a duras penas nombran en pequeñas palabras o dan pistas en oraciones informales, pero, soy casi que incapaz de percibirles.

Ya que El Grito es muy mainstream... degustemos la Melancolía. 


Mis hipótesis son simples: Algún nombre deben recordar mientras organizan las palabras que conforman cada frase. Con personas cercanas a mí, imagino los posibles, es una actividad sin provecho pero, por Dios, ¿cuando yo hago alguna actividad con provecho? eliminando estudiar, pues. Con personas con las que no resguardo mucha información, me incentiva la curiosidad. Oh, Dios, si que me inmiscuyo en asuntos que no son de mi importancia, como dirían otros.

Bueno, aprovecho la entrada también para comentar otras cosas que me molestan referente a la comunicación: Me molesta que cuando envíe un mensaje de texto, me respondan con una llamada. Es realmente un fastidio, por lo que dejo que suene The boys, de SNSD, versión en inglés (Bueno... casi siempre cuando suena le dejo sonar un poco, es que me encanta esa canción) hasta que le mande a buzón de voz. Será una actitud inmadura, pero, hay situaciones en que el hablar interrumpe mis actividades o que simplemente no quiero hacerlo.

Sí, sí, la entrada me ha sido de poco provecho, puedo abordar de forma más general tan hermoso tema, pero, per Dios, el día fue pesado. Ya que no tengo mucha idea de qué canción colocar, pues, que sea la que anuncié: El problema, ¡por el martillo de Thor, esa letra es hermosa y tan verídica!





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